Al contrato de leasing también se le conoce como contrato de arrendamiento financiero ya que puede servir para adquirir un activo de gran valor.
El contrato de leasing es diferente del comodato, pues este último consiste en un préstamo realizado solamente para usar un bien. Mientras que el leasing ofrece la posibilidad de explotarlo, recibir financiamiento y comprarlo.
Por esta razón, el contrato de leasing es una especie de préstamo o financiamiento.
Características del contrato de leasing
En cada país, las leyes podrían establecer ciertas condiciones o diferencias en relación a las formalidades del Contrato de leasing.
Para caracterizarlo, es necesario tener en cuenta que cuando el plazo o vigencia del Contrato llega a su fin, pueden producirse tres situaciones diferentes:
- Que el arrendatario decida no continuar la relación contractual y devolver el bien a su propietario o arrendador.
- Que el arrendatario desee renovar el Contrato, dándole una prórroga por un nuevo periodo de tiempo.
- Que el arrendatario obtenga la opción de compra del activo, pudiendo adquirirlo a un precio determinado, que será un valor residual. El valor residual considera los abonos que realizó el arrendatario.
Mientras el contrato de leasing esté vigente, el arrendador no pierde la propiedad sobre el bien, es decir, no deja de ser el titular.
El contrato contempla lo siguiente:
- Los daños que reciba el bien mientras es usado bajo este contrato serán pagados o resarcidos por el arrendatario.
- También pueden existir cláusulas en las que se disponga la inspección del arrendador con cierta frecuencia.
- Incluso puede obligar la adquisición de un seguro por parte del arrendatario.
Otra característica que puede ser ventajosa para el arrendatario, es que el arrendador es que quien corre con los gastos fiscales o impuestos indirectos (IVA).
Clases de leasing
Un contrato de leasing puede representar una oportunidad para adquirir o renovar activos empresariales.
Es necesario contar con una estrategia que considere la depreciación u obsolescencia del activo en el menor tiempo posible.
De esta forma, el leasing puede ser:
- Mobiliario o inmobiliario: Cuando se trata de un equipo o, también, de un inmueble.
- Operativo: Cuando se otorga el derecho de uso del bien, pero sin opción de comprarlo al terminar el contrato.
- De amortización total: cuando incluye el derecho de comprar el bien.
- Leasing back: Quien posee un bien transfiere su propiedad a una sociedad de leasing y ésta, a su vez, le permite al mismo vendedor usarlo.
Ventajas de suscribir un contrato de leasing
Entre los beneficios se destacan:
- Se recibe un financiamiento hasta del 100% del valor de la propiedad.
- Ofrece flexibilidad con los plazos y cuotas.
- Le brinda a una empresa la oportunidad de renovarse.
- El capital de trabajo necesario para invertir es muy pequeño.
- El cliente (en este caso el arrendatario) mantiene en un nivel óptimo su capacidad para endeudarse.