En un mismo asiento pueden existir una o más cuentas en el haber, pero existirán la misma cantidad de cuentas en el debe.
Así, siempre hay que comprobar que la cantidad de cuentas en uno y otro caso son iguales. Ambas se contrarrestan.
¿Qué se incluye en cada cuenta?
Cuando se lleva este tipo de registros contables, hay que diferenciar muy bien qué se debe incluir y qué cuenta. Por ello:
- En el haber aparecerán la disminución de activos, cualquier aumento a favor del patrimonio y de pasivos.
- En el debe ocurre todo lo contrario. Se asienta aumento de los activos y la disminución del patrimonio y de los pasivos.
Fundamento de la partida doble
El principio de operación de este método contable es el que sigue a continuación:
- El que recibe un producto o servicio es el deudor, y la parte que lo entrega es el acreedor.
- Los recursos siempre tienen una procedencia, por lo que no existe un deudor sin un acreedor.
- Para exista un equilibro en el patrimonio, el valor entrante ha de ser igual al de salida.
- El valor registrado en una cuenta como entrante, debe registrarse de salida en la misma cuenta.
Se puede apreciar que siempre que algo aumenta es porque otra cosa disminuye y viceversa.
Ese es el principio de funcionamiento del método de partida doble.
Importancia de la partida doble
Es evidente que gracias a la contabilidad la empresa puede llevar un control de todas sus operaciones financieras.
Por esa razón, la partida doble es importante ya que:
- Permite crear asientos de manera clara y sin confusiones.
- Asegura el principio de imagen fiel para mostrar resultados sobre la situación económica de la empresa y su rentabilidad.
- Permite la elaboración anual de los estados contables y la posterior declaración de impuestos.
- Ayuda a planificar eficientemente los pagos o realizar buenas inversiones.
Ejemplo de partida doble
La forma más sencilla de ilustrar este método es considerar que, cuando se vende un producto, hay que registrar el dinero entrante y el bien que ha salido.