Tanto el costo de producción, como el costo de venta, tienen un significado completamente diferente.
Entre ellos:
Estos son probablemente, los gastos más elevados que una organización debe afrontar.
La relación que existe entre costo de venta y costo de producción, dependerá de como realice la empresa la evaluación de los costos a afrontar.
Algunas empresas no consideran que el costo de producción sea una parte relevante y fundamental del costo de venta
Otras sin embargo, entienden que no se podrá determinar el costo de venta de un producto, sin contemplar su costo de producción.
Todas las empresas deberán evaluar y afrontar los costos de producción.
Esto es de suma relevancia, producto de que los costos de producción suelen sufrir incrementos de forma mas seguida, a diferencia de otros tipos de costos.
Es por eso que, a los fines de no sufrir una perdida en su rentabilidad, la evaluación de las empresas debe ser lo mas detallada posible.
Si eventualmente, el costo de producción termina siendo más elevado que el posible costo de venta, la empresa se verá obligada a dejar de producirlo para no dar pérdidas
Dentro de los costos de producción, se pueden encontrar cuatro tipos de costos fundamentales durante el proceso de elaboración:
Los costos directos son aquellos gastos que la empresa realiza al producir un bien en particular. La pieza fundamental de los costos directos es la materia prima.
Son aquellos gastos realizados por la empresa pero que no guardan relación directa con el bien que se obtiene al final del proceso de producción.
El local en el cual la empresa comercializa sus bienes o servicios, sus oficinas y depósitos, están contemplados como un costo indirecto.
Los costos fijos son aquellos gastos que no tendrán variación alguna, durante el proceso de producción.
Los costos variables son aquellos gastos que deberá enfrentar la empresa y que sufrirán variaciones de precio, a lo largo del proceso de producción. Todos los materiales necesarios para la producción de un bien, son considerados costos variables.