De acuerdo al capital con el que nace la Empresa, o el origen de los fondos, éstas pueden ser públicas, privadas o mixtas.
Las del sector público pertenecen a organismos estatales, administradas por el gobierno. Mientras que las privadas pertenecen a personas o grupos de personas. Y las Empresas mixtas tienen capital público y privado.
Toda Empresa nace con la puesta en práctica de una idea, y el emprendimiento satisface las necesidades de los demás.
Esa actividad comercial que va a desarrollar se debe realizar con visión estratégica, y valiéndose de la inteligencia de negocios.
Para ello, está a disposición una ciencia que trata todo lo que tiene que ver con su gestión y planificación: La administración de empresas.
Tipos de Empresas
Es necesario distinguir la Empresa de acuerdo a su naturaleza y reconocimiento en la estructura jurídica de cada país. Así, según su constitución se encuentran:
- Las Empresas individuales: Dirigidas por una sola persona.
- Las sociedades anónimas: Donde participan un conjunto de socios a través de un capital social distribuido en acciones.
- Las sociedades de responsabilidad limitada: En las que la responsabilidad empresarial está restringida por el capital que se dispone.
- Las cooperativas: Son asociaciones horizontales y no jerárquicas, donde todos los socios participan activamente en la administración y gestión.
Estructura de una Empresa
No existe una forma única de organizarla, pero en líneas generales, toda empresa se organiza en forma vertical u horizontal:
- En los esquemas verticales: Existen estructuras jerárquicas con un presidente y vicepresidente. Éstos delegan tareas a un grupo de gerentes y trabajadores. Los beneficios van en función del cargo que ocupan.
- En los esquemas horizontales: No hay jerarquías y los cargos tienen igual importancia. Además, los beneficios se reparten por igual.
Luego, la Empresa debe disponer de unos activos fijos y líquidos, financiamiento, trabajadores especializados y no especializados.
Se rige por procesos contables que ordenan toda la información económica y financiera. Y produce unos beneficios que se reparten anualmente entre los socios.
Clasificación de las Empresas
Son muchas y variadas las formas de clasificarlas, dependiendo de su tamaño, sector, finalidad, localización, etc.
Según la actividad económica, son:
- Empresas del sector primario: Todas las que se dedican a la extracción de materia prima. Por ejemplo, la agricultura y la minería.
- Empresas del sector secundario: Las que se dedican a transformar las materias primas. Por ejemplo, las industrias procesadoras de alimentos.
- Empresas del sector terciario: Las que prestan servicios como la distribución, venta, o asesoramiento especializado.
Según su tamaño se encuentran:
- Las microempresas: Que disponen de una plantilla muy pequeña de empleados (menos de 10).
- Las pequeñas empresas: Con un máximo de hasta 50 empleados.
- La mediana empresa: Con empleados que superan los 50 hasta los 250.
- Las grandes empresas: Disponen de una cantidad muy grande de empleados.
Por último, están aquellas clasificadas según su distribución geográfica. Estas son Empresas:
- Locales: Las que desarrollan actividades sólo en un pequeño territorio.
- Nacionales: Las que generan bienes o servicios para todo el país.
- Multinacionales: Aquellas que comercializan sus bienes o servicios en distintos países.
- Transnacionales: Las que se radican en otros países y no sólo comercializan, sino que producen dentro de éstos con mano de obra y materia prima del país anfitrión.